¿ Qué ocurre cuando tenemos un vaso lleno de agua y queremos seguir llenándolo ?
Si nuestro cubo está lleno de basurilla, ... ¿ podríamos llenarlo de oro ?

¿ Qué necesitaríamos hacer primero ?
¡ VACIAR el contenido que sobra !

Creo que esto nos pasa igual con muchas de las cosas, ideas, personas, gestos, manias, vivencias, reliquias,... que nos acompañan cada día.
Nos sobran, molestan y están llenando nuestro interior.
Completan nuestro vaso, se van almacenando en nuestra mochila y no nos dejan ocuparla con nuevas alternativas.

Las personas tenemos una de las libertades más importantes, que normalmente usamos poco, la capacidad de desprendernos de lo que nos sobra , de lo que nos produce dolor, de lo que yo no es agradable aunque en el pasado si lo fuera, de lo que se nos presenta como tóxico, de lo que nos complica la vida.
Para evitarlo no dejes de utilizar este verbo activo : ¡ VACIAR !