Ya lo decía Sting en una de sus famosas canciones :
" Free, free,...set them free ".

Así lo creo yo; cuando quieres a alguien de verdad uno de los mejores aportes que le puedes hacer es dejarle respirar. Y la otra persona te lo devolverá con más amor.
No hablo sólo de la pareja con que has decidio compartir tu vida, también de los buenos amigos, de los compañeros en el trabajo, de los hijos, de ...
Se trata de apretar fuerte , dar , recibir pero sin axfisiar.

Siempre he sido partidario de que, en muchas ocasiones, menos es más.
¿ Recuerdas cómo puedes mantener más arena de la playa en tu mano ?
Sólo cuando la mano la tienes abierta. En ese caso la arena se quedará contigo.
Pero, ¿ qué pasa cuando intentas cerrarla ?
La arena empieza a caer, a salir por los pequeños huequecillos entre tus dedos
...a huir de tu mano.

Es igual en el caso de las relaciones entre las personas.
Tenenemos que aprender a dejar respirar.
Fundamentalmente esto nos pasa porque las personas tenemos un elevado sentido de la pertenencia. Pero por cerrar espacios entre los otros y tú no consiguirás más lealtad.

Todos necesitamos un espacio propio , personal, interdependiente.

Sólo 4 ideas para evitar generar estados de dependencia mal entendida:

* Anima a que sigan con sus aficiones, amigos, maneras, gustos, ...

* Tus inseguridades son sólo tuyas, no de los otros. Puedes pedir ayuda, pero aunque te la concedan siguen siendo inseguridades tuyas. Vívelas, compartelas, pero no las dones con el fin de que así puedas encontrar la solución que esperabas.

* Mezcla con frecuencia el " nosotros " con el " tu " y con el " yo " .
* Genera pausas de tiempo y espacio, pausas que se deben producir de forma natural. Se trata de dos vidas que quieren compartir experiencias, amistad, vivencias, trabajo, amor, ...
Pero no olvides que el concepto compartir lleva implicito la necesidad de la individualidad.

Y tú, ... ¿ cómo llevas tu dependómetro ?