Estos días he estado trabajando en un nuevo curso llamado
" Storytelling: el arte de contar historias ".

Ya lo he " puesto en escena " con los amigos, siempre tan amables, de AZ

El Storytelling está siendo cada vez más utilizado para todo lo que tiene
que ver con técnicas de comunicación.
Para cualquier tipo de relato, desde una película a un discurso político.
Desde una campaña publicitaria a un informe comercial.
Desde el coaching a la presentación de una empresa.

Durante esta formación aprendemos a elaborar y contar historias,
a modo de metáforas que nos ayuden a hacer que nuestros públicos,
destinatarios de las mismas, los llamados " escuchantes " ,
puedan mejorar comportamientos, estimularles a la acción, ayudarles a vencer
resistencias al cambio, etc...

Los cuentos, las metáforas , las parábolas, son una forma distinta
de hacer que una lección perdure más en el tiempo, a veces que se haga
inolvidable y , sobre todo, que lleguen a calar mucho antes
y con más fuerza dentro de nosotros.

Por eso los cuentos son tan poderosos, no sólo para los niños,
sino también como estímulo formativo con los adultos.
Un buen cuento nos habla a la razón, a la emoción y a la acción.

Con técnicas muy parecidas, la publicidad ,con mucha frecuencia,
utiliza historias para intentar dejar a fuego en nuestra mente, las marcas.
Usa las metáforas para posicionar su producto.
Para dejar una impronta en la mente del potencial consumidor.

Y qué son, si no, las campañas políticas presidenciales ¿?
Son historias, narraciones que nos intentan llevar a un viaje futuro,
a una nuevo " lugar " donde pasarán otras cosas.
Para así convencernos de que debemos confiar y dar su voto al candidato de turno.
Sin embargo, un cuento bien contado es mucho más que retorica.
Es tener la capacidad de trasladar al oyente sensaciones que te hagan
sentir que esa historia puede ser vivida por uno.
Desde ahí se produce la conexión.

Un buen relato además es lúdico, te divierte,
te engancha sensorial y emocionalmente.
Da sentido a los conceptos, es didáctico, mucho más nemotécnico
y favorece la cohesion entre los públicos escuchantes,
provoca participación, interactividad.

El Pentágono utiliza el Storytelling para diseñar sus campañas de comunicación
frente a la crisis.
La Nasa contrató al guionista Syd Fyeld para que ayudara a sus científicos
a relatar los avances descubiertos de forma seductora.
Los discursos del presidente Obama están elaborados bajo estas mismas técnicas.
Profesionales de la educación y la pedagogía, como McDrury o Alterio, utilizan
el storytelling para elaborar programas educativos que consigan superar
la desidia de los estudiantes y les ayuden asía concentrarse y a aumentar
su atención en las materias.

Empresas como Microsoft contratan a guionistas de cine para enseñar a sus
ejecutivos técnicas de comunicación y persuasión.
¿ Qué es Steve Jobs ?
Un auténtico mago especialista en contarnos historias.
Un verdadero CEO ( Chief Emotional Officer ).

Por todo ello el número de profesionales del mundo de la empresa privada
y de los estamentos públicos estadounidenses asociados al
National Storytelling Network no deja de crecer.
Como también lo hacen las cifras de susbcriptores a revistas como
Storytelling Magazine y Storytelling World.

Y si esto es una verdadera ventaja competitiva,
¿ por qué seguimos haciendo presentaciones en las empresas
tan racionales , tan poco emotivas, tan faltas de historias,
tan cargadas de datos, de cifras ?

Es normal que cada vez sea más difícil entrar en la mente de los destinatarios
de nuestros mensajes.
Están saturados !!!
Y escépticos a casi todo.
Especialmente a lo que no les genera sorpresa.
Desconectados de todo aquello que no les produce una llamada de atención.
Nos dicen con la mirada:
" No me chilles que no te oigo ".

Los cuentos, las metáforas son una vieja fórmula que nos sirve
para trasladar ideas nuevas, frescas.
Para ser mejores comunicadores en este escenario nuevo de la vida.
Por eso te recomiendo que utilices mucho más eso de
érase una vez...