“Si tienes dos monedas, 
compra pan con una de ellas.
Y con la otra, 
compra narcisos para el alma
(Proverbio popular irlandés)


Cada día nos enfrentamos a numerosos hechos que no nos gustan, a otros que nos hacen tilín,
a algunos que no esperamos, que nos sorprenden para bien o para mal, a otros que nos descolocan,
que nos sacan de nuestro estado natural.
Hecho, situaciones cotidianas de la vida que son provocadas por nosotros mismos
o que nos vienen del entorno en el que habitamos.
Esto es la vida. Esto es vivir.

Me gusta el proverbio irlandés que abre este post porque, en su sencillez,
explica el aprendizaje más básico que conozco sobre la vida.
Y sobre cómo enfrentarnos a las situaciones que cada día nos acontecen,
sean o no elegidas por nosotros.

Imagina una de estas situaciones. Elige la que quieras.
Aprende a observar que esa situación, sea cual sea, se compone siempre de “dos monedas”,
siguiendo la metáfora irlandesa.
Una moneda es el hecho que la define. La circunstancia a la que está sometida.
La otra moneda es la interpretación que haces de ese hecho que te ocurre o te ha ocurrido.

En el banco de la vida, las dos monedas no tienen el mismo valor.
La primera no depende de tu libertad individual de elección. Con ella, unas veces podrás elegir y otras no.
Con la segunda moneda, siempre eliges. El uso de esta segunda moneda sólo de ti depende.

La “circunstancia” puede apoderarse de una de las monedas. De esa que de ti no depende.
Pero siempre te queda una. La más válida. Sobre la que tu eliges.
Se trata de la moneda de la actitud.
Moneda con la que te enfrentas a todo aquello que te esté pasando.
Disposición mental que eliges utilizar para acercarte a un hecho de una forma u otra.

Carl Gustav Jung lo dejó escrito así:

“ Yo no soy lo que me ha ocurrido,
sino lo que he escogido ser "


Tres son los principios elementales que rigen esta forma de entender la vida.
Tres aprendizajes sobre los que poner foco.
Tres elementos sobre los que encender la luz.
Tres ideas necesarias para avanzar y sentirnos felices.
Tres caminos para no olvidar.


La primera ...

ERES ÚNICO

Somos 80 billones de personas en la Tierra.
Pero tu vida es sólo tuya y única.
No pertenece a nadie más. Ni siquiera a las circunstancias que habitan fuera de ti.

Tu vida nadie la ha vivido antes. Ni lo hará después.
Vienes con huellas de otros y también dejarás tus huella en otros. En tu descendencia.
Tus decisiones intervendrán en el futuro de otros.
Aún así, tu vida es sólo tuya.

Todos somos diferentes. Diferentes por dos factores.
El primero es biológico. Nuestra vida empezó a formarse antes de nacer.
Llevas en tu interior puestos los recuerdos de tus antepasados. Tu herencia genética.
El segundo factor corresponde a las diferentes elecciones que en tu vida haces para ti,
o dejas que otros hagan por ti, (en este caso, te gusten o no, también son tuyas).

Comprender y aceptar que sólo podemos actuar sobre el segundo factor que nos hace únicos es muy importante.
Nos sitúa en hacer un uso adecuado de la segunda moneda, la de la actitud con la que elegimos vivir.
De esa que nos aporta valor de elección.



La segunda...

ERES UN CREADOR


Habiendo entendido el primer elemento este es consecuencia del mismo.
Nos regala la idea de que, te haya sucedido lo que te haya sucedido, sea cual sea tu historia,
tu relato de vida, tienes acceso a cambiarlo.
Por una razón básica: porque sabemos que no podemos cambiar el pasado, pero sí el futuro.
No tenemos acceso a lo que ya ha sucedido, sólo a interpretarlo de una forma diferente.
Pero sí tenemos vía libre para entrar en la creación de futuro.

Las personas, frente al resto de animales y naturaleza viva, tenemos un elemento único: somos creadores.
Tenemos un poder esencial: la imaginación.
Se podría definir como la capacidad de representar mentalmente conceptos que no han sucedido,
que no están presentes para ser usados por ninguno de nuestros sentidos.
Y, lo mejor, su segunda derivada, la capacidad de inventar la forma de convertirlos en realidad.
Es el fenómeno de la creación.

Evolución y revolución, creatividad e innovación, son un subproducto de la imaginación.
Es lo que nos hace que en términos biológicos y culturalmente viajemos hacia el futuro como ninguna otra especie animal.

Este hecho nos hace que podamos crear ante cualquier hecho siempre un conjunto diferenciado
de alternativas, de posibilidades, de caminos sobre los que elegir.
Si algo no nos gusta, podemos crear algo nuevo.



La tercera...

ERES SORPRENDENTE


Aunque la imaginación te hace crear futuro y traerlo al presente,
con frecuencia lo que hace la vida divertida es cuando te encuentras a ti mismo haciendo cosas
que nunca hubieras imaginado que harías.
Te sorprendes.

Y por eso no te extrañe que vivas la vida lleno de sorpresas.
Que ella también te sorprenda. Ponga cosas ante ti que nunca hubieras pensado.

Déjate llevar por las sorpresas.
No quieras tener todo bajo control. Ni bajo la carpa de la seguridad absoluta.
La vida es incierta. Te guste o no.
¡Acéptalo!
¿Por qué vivir lleno de alarmas? ¿Qué sentido tiene vivir lleno de temor?
¡Atrévete!

Vive abierto a nuevas experiencas.
A probar. A mirar a otro lado.
A cambiar de opinión, el mayor acto de valentía del ser humano.
A explorar nuevos caminos. A encontrar nuevas posibilidades.


Si con la otra moneda compras narcisos para el alma,
si te permites ser único, creador, sorprendente, verás que nunca te sentirás víctima de tus circunstancias.
Sino que con cada decisión estarás

escribiendo tu biografía