La sal de la vida

Como es abajo es arriba.
Como se es a un lado, se es al otro.
Como se mira adelante se mira atrás.
Como saltamos nos agachamos.

Utilizamos la expresión LA SAL DE LA VIDA
al referirnos a esos placeres que nos llegan de vez en cuando.
Llamamos la sal de la vida a aquello que nos hace reír, chipotear, vibrar, ...
La sal es oro blanco, sin ella el organismo humano no puede vivir.
Sin la sal de la vida tampoco.
En exceso puede matar.
Sin embargo, en exceso la sal de la vida, puede hacer que dispongas de una vida mejor.
En esto se diferencian...

Me gustan los días que tienen cierta dosis de sal, ...de sal de vida.
Son días que se convierten en especiales, sin tener nada especial, ...
Son tan sólo especiales por algún pequeño detalle, por su sal.
Me refiero a esos días en los que prefiero saltarme una comida y cambiarla por un paseo, sin destino,
esos en los que una copa de cava sabe diferente, más burbujeante que sus propias burbujas.
Días en los que un libro que ya leí sabe diferente, más salado;
esos días en los que me encuentro un paisaje hermoso sin haberlo buscado;
días en los que escucho un gran concierto en la esquina de una calle por la ciudad, sin esperarlo.

Son días en los que suelo citarme en mi agenda. A mi mismo. Y los lleno de sal.
Sin necesidad de nada más. De nadie más.
Días en los que tan sólo necesito un buen libro, el artículo que me tiene atrapado,
o practicar nuevas escalas con mi bajo eléctrico.
O también días en los que no sería nada sin su mirada, su tacto, o su sabor salado.
Días en los que no puedo apartar la mirada de sus ojos.

Y es que de eso va estar vivo, de momentos salados,

de poner sal 
a la vida