No tengo que olvidarme de las cosas que me hacen bien

FITO PAEZ


Estar vivo no es lo mismo que sentirse vivo. O eso creo yo...
Estar vivo es una entidad biológica.
Sentirse vivo tiene más que ver con sentir la vida. Sacarle el jugo.
Estar vivo indica una forma mental pasiva de enfrentarse al tiempo.
Sentirse vivo es afrontar los hechos, y sus consecuencias, a lo largo del tiempo
de forma activa, participativa, eligiendo.

A veces, y sólo a veces, siento que vivimos sin sentirnos vivos.
Para vivir no se necesitan razones, para sentirse vivo sí. 
La vida con sentido florece a través de múltiples propósitos.
El sentirse vivo nos requiere energía. Movimiento.

Si te sientes vivo, las expectativas te irán cambiando como te va cambiando la vida.
También los deseos. Y las relaciones. Lo que habita fuera de ti.
Si te sientes vivo, el amor que sientes por ti, por tu propia vida, 
el auto-aprecio a lo que eres, tu valoración sobre ti mismo, no cambiará. 
Si te sientes vivo, aunque todo cambie en tu entorno, 
el poder interior siempre mantendrá su llama.
Y esa será la verdadera belleza, la interior.
Quizás sea entonces cuando no necesitas forzarte para nada.
Actuarás como actúa un árbol, que da sombra sin tener que hacer nada.
O como el viento hincha las velas de los barcos. Simplemente soplando.
Y el agua de un río moja las piedras a lo largo de su curso.

La vida es más sencilla de lo que parece, ...,
somos nosotros quienes la complicamos.

Y todo esto me viene a la cabeza porque esta misma semana se nos ha ido
de esta vida alguien que se sentía muy vivo, incluso esos días que no eran
sus mejores días, donde su propia biología le ponía a jaque.
Me refiero a Pau Dones, el que nos dio tanto Jarabe de Palo.

Creo que nos ha dejado una especie de testamento para no olvidar.
Para tenerlo muy presente. Aprendamos. Y hagamos.
Algunas de las ideas que escribió en sus últimos días son esencias
para sentirnos vivo, ... o así lo creo yo.

Por compartir, nos ha dicho que no se nos olvide
que el secreto está en vivir el presente, y no perdernos por pensar tanto en el futuro.
Que dejemos de creer en la suerte y creamos más en cada uno de nosotros.
Que ríamos, mucho.
Que cantemos en los bares, en la ducha, en las cenas, ,,, cuando nos venga en gana.
Que abracemos y nos achuchemos. Que nos besemos. Nos toquemos.
Que nos escuchemos, a la vez que respetemos el silencio.
Que el enfado es una estupidez sin sentido. 
Que mandemos a la mierda al ego y al orgullo.
Que pare estar vivos y sentir la vida, perdamos el miedo a la muerte.
Y también perdamos el miedo a la vida.
Que cuando la vida nos cierre una ventana le rompamos el cristal. Y salgamos volando.
Que le demos calidad a la vida porque belleza ya tiene.
Que digamos "te quiero" con frecuencia y sin vergüenza.
.......

¡Gracias Pau!




Vive sintiendo la vida.
No es más que un montón de muchos instantes. 
A veces, repetidos. A veces, nuevos.
Elige los que puedas. Acepta los que no.

Y por todo ello,

 AGRADECIDO !

Y recuerda esto:

LA SALIDA 
SIEMPRE ESTÁ 
HACIA ADENTRO