Vengo de pasear pegadito al mar, podía oír su pequeño rugido primaveral, el ir y venir de las olas sin fuerza del Mediterráneo.
Y mientras paseaba y miraba el monumento al pescador que hay en mi pueblo, pensaba que hay dos tipos de personas :
las que ACTUAN y las que HABLAN.

A medida que el tiempo pasa por mi vida, una forma eufemística de decir que uno se va haciendo mayor, estoy más convencido de que lograr hacer cosas proporciona felicidad.
Hacer que suceda lo que has pensado, aquello de lo que te gusta hablar junto a un buen café, te da placer.

Creo que esta es la razón principal por lo que algunas personas, con el paso del tiempo se aficionan a la jardinería, a la mecánica, al punto de cruz, al cultivo de bonsais, al bricolaje, al macramé, o alos collages, ...
Estás haciendo algo. Has hecho algo y lo ves ahí, delante de ti.
Al igual que un niño desfruta colocando una pieza sobre otra`para construir la torre.

Hay algo que antes no estaba, no existía.
Actuar y empezar a ver.

¿ No es esta la verdadera sabiduría ?
¡ La sabiduría activa !
La que construye, contribuye...

Yo creo que la sabiduría se parece más a la jardinería que a tomar una excelente foto mental de un precioso jardín.

Leí del psicólogo William James que
" el pájaro no canta porque es feliz, es feliz porque canta ".

Esa es la clave : ¡ ACTUA !